sábado, 23 de marzo de 2013

EL TECHO DEL MUNDO

El cielo de cuando nos encontremos 
será más amarillo que de costumbre 
tendrá más niebla que rocío 
estará rotundamente frío
será un cielo remoto que encenderemos sin culpa
una geografía nutrida de la vieja hermosura del aire
un recoveco uniforme en el que se esconderán las tinieblas
será un cielo de nieve gris, de fuego verde 
surcado por hojas, inundado por sombras.

El cielo de cuando nos encontremos
será más rojo que nunca
tendrá siempre una pizca de espacio 
un cajón de pandora
un epitafio sin hora
será alfiler de mariposa
tendrá estatuas de sal
árboles sin dueño
aviones de cristal.

El cielo de cuando nos encontremos
tendrá más de yo que de nosotros 
será el porvenir de la mirada
el que acarreé corazones sin destino
ese cielo
nos encontrará ancianos y cansados
tanto que no podremos distinguir el ayer del ahora
y su manada de nubes quimeras del viento
nos juntarán de manera venturosa 
dejándonos a merced 
de un dios que siempre está en silencio
que nunca tiene frío.

No hay comentarios: