jueves, 2 de julio de 2015

ANTES QUE TÚ

No sé si le ha pasado a ustedes por la cabeza, asesinar. Yo intento todos los días no hacerlo. Es una lucha constante verme al espejo. Desnudar con la mirada aquel otrora reflejo. No sé si le ha pasado alguna vez por la mente, matar al extraño que está primero que usted en la fila del café. No sé si usted, haya despertado hoy con la idea de cocinarle con lejía la lengua a alguien. Algunos podrán decir que estoy loco, otros dirán que mi tío amoroso, me violó a los ocho años. Lo peor es que están equivocados. No tengo una anécdota que contar para justificar mis muertes. Todos necesitan una. Deudas, ignorancia o religión. Yo no. Yo le mataré a usted y a otros, por el puro placer de verle suspirar por última vez. Para ver cómo derraman su última lágrima o escucharles su última plegaria. No sé si le ha pasado a usted — ahora que lo veo sangrar de esa manera— no creo que lo haya pensado, porque si fuera así, sería yo el que estaría amarrado a esa plancha en el sótano de una casa de campo.